Ideales para tomar en aperitivos con unas lonchas de salmón ahumado, o lomo especiado con el toque de queso cabra que no es demasiado pronunciado. Enfín, riquísimos. Ah y con una cervecita fresquita ya ni os cuento jejejeje!!!!.
INGREDIENTES:
250 gr de leche
20 gr. levadura prensada
500 gr. harina
15 gr. azúcar
1 cdita de sal
50 gr. aceite
50 gr. cebolla cortada en dos
1 diente de ajo
2 ramitas (solo hojas) perejil fresco
1 huevo
150 gr. de queso de cabra en rulo
150 gr. queso cremoso tipo philadelphia
PREPARACIÓN:
Ponemos la leche y la levadura en el vaso y calentamos 3 minutos, 37º, vel.2
Añadimos la harina, el azúcar, la sal y el aceite. Amasamos 2 minutos, vaso cer. vel. espiga
Dejamos reposar la masa dentro de un bol cubierto con film transparente, hasta que doble el volumen .
Ponemos la cebolla y el ajo en el vaso y troceamos 4 segundos al 5. Bajamos los restos y si es necesario repetimos la operación. Agregamos el perejil, el huevo, el queso de cabra y el cremoso. Mezclamos 20 segundos al 4.
Con un rodillo, extendemos la masa sobre una superficie engrasada con unas gotas de aceite (para que luego se despegue muy bien) formamos un cuadrado de 40 x 40cm o si queremos los panecillo más pequeños de unos 60x60cm. Untamos la masa, con la preparación del vaso, dejando sin cubrir unos 10cm del extremo superior. Enrollamos para formar un rulo.
Cortamos ese rulo formando unas 12-15 rodajas iguales y las colocamos separadas entre sí, sobre una bandeja de horno cubierta con papel de hornear.
Precalentamos el horno a 200º. Dejamos reposar los panecillos durante una media hora, en un lugar templado y libre de corrientes de aire. (podemos cubrirlos con film o un paño para que no formen costra)
Pincelamos los panecillos con huevo batido y un poquito de leche para que se queden pegadas las semillas de amapola o sésamo.
Horneamos durante 20 ó 25 minutos, según hornos, hasta verlos dorados.
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