No sé si lo habré dicho ya pero mi hijo tiene una pequeña huerta en casa y tiene sembrado verduritas de varias clases . Hace un par de días recogió unos kilos de patatas pequeñajas, le pregunté que porqué las había cogido si todavía no era el tiempo y que tenían que crecer más y me dijo que era porqué se acordaba de lo buenas que estaban aquellas patatas que nos comimos en Canarias y quería que se las hiciese igual pero que pasaba del mojo. Así que anoche las hice para cenar para nosotros con el mojo picón rojo y para el niño solas. También hice una ensalada y se convirtió en una estupenda cena.
INGREDIENTES:
800 gr de patatas pequeñitas
200 gr de sal gorda
agua
1/2 limón (no sé que función tiene pero me lo dijo una camarera de un restaurante Canario que se lo echara)
PREPARACIÓN:
Se lavan bien las patatas y sin pelar se ponen en una olla con la sal y se cubre de agua sin que sobrepase mucho las patatas. Se ponen a cocer unos 20-30 minutos y cuando estén cocidas se le vacía el agua y se deja unos minutos al fuego para que cojan ese color blancuzco.
4 dientes de ajo
1 cda colmada de pimiento choricero
1 cdita de pimentón dulce
2 cdas de vinagre
1 pizca de comino
aceite de oliva
sal gorda
PREPARACIÓN:
Pelamos los ajos y le quitamos el germen. Lo ponemos en el vaso de la turmix, le agregamos un poco de sal, el comino , el vinagre ,el pimiento choricero , el pimentón , el aceite de oliva (un buen chorro generoso sin miedo) y lo trituramos todo. Ya estará listo. Si os gusta más espeso le poneís un poco de pan de molde sin corteza. El sobrante aguanta en la nevera, en un bote hermético varios días incluso 1 semana.
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